Como ha sido costumbre —si bien discrecional— me he decantado por reproducir los poemas de corta extensión, o minipoemas, contenidos en el poemario Plagio (México, Joaquín Mortiz, 1973), para documentar que la poesía avizora épocas, como ésta en que Twitter y otros canales acercan las herramientas de escritura y comunicación a más personas que nunca, en mensajes menores a 140 caracteres.
Telegramas
1
Quiero pensarte muerta
y que tu muerte sea
un plagio de mi canto
2
Como los niños:
a jugar con barro
Pondremos
las lágrimas tú y yo
No habrá escasez de polvo
3
Al arder inventamos las cenizas
4
Tienes la edad del mundo
y ni un minuto menos
pero te ves más joven
5
Estar solo es perder el sitio
andar a la intemperie
Dame un aquí en tu cuerpo
6
Muchacha desnuda
te voy a escribir
un poema-guante
7
En tu prisa por crecer
echaste alas y raíces
qué vas a hacer?
Voces
El viento y las palabras no escarmientan:
siempre desenterrando caracoles
donde estrenar el viejo asunto
A sí mismos se plagian
Mujer nocturna
Leo en la oscuridad
tu cuerpo Braille
Me parece imposible
separar fondo y forma
Pájaro
Más canto que cuerpo
Más vuelo que tiempo
No cabe en sí mismo
Ni en todos los días
Niña muy pequeña
Le di una flor a la niña
y ella la agitó en el aire
pero la flor no sonaba
Festina lente
Máquinas de guerra
como su nombre
Escarabajo
cornuto
Avanza entre hojas secas
enorme la mandíbula
para duelos de amor.
Imagen: Drawing hands (1948), M. C. Escher.
Sobre la autora, aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario